El desafío de conciliar trabajo con vida personal en un contexto de pandemia
La pandemia instauró al Trabajo a distancia como una de las la formas para seguir con las actividades laborales, sin riesgo de contagiarse de la COVID-19. No obstante, con el pasar de los meses aparecieron varios problemas ocasionados por esta nueva modalidad de trabajo, sobre todo, en el ámbito de la salud mental de los trabajadores y trabajadoras.
Esto se refleja en los resultados del cuestionario SUSESO/ISTAS21 en el marco de la implementación del Protocolo de Vigilancia de Riesgos Psicosociales en el Trabajo, el cual se aplicó al personal UdeC entre diciembre del 2020 y enero del 2021. En dicho cuestionario, se evidenció una puntuación de riesgo alta en la dimensión de “Doble Presencia”, la que mide la preocupación de la interferencia trabajo-familia.
Teniendo esto en cuenta, un desafío institucional es analizar estos resultados-trabajo que comenzó desde el momento que se dieron a conocer los resultados- y elaborar propuestas que establezcan un equilibrio entre el ámbito laboral y personal, para así evitar el colapso producto de la superposición de ambos ámbitos durante la contingencia sanitaria.
Disfrutar de lo simple
Una de las recomendaciones más habituales es crear un espacio individual donde se pueda reflexionar y pasar un momento de disfrute con actividades sencillas, evitando siempre lo complejo o lo más elaborado, ya que se puede transformar en un problema más y el objetivo es ir hacia una emocionalidad más positiva.
Katherine Forman, Directora del Programa PROMOSALUD UdeC, complementa esta idea al señalar: “Es importante el uso del tiempo libre para desconectarse del trabajo y realizar otras actividades que nos resulten agradables, placenteras y relajantes. Además, es de gran ayuda fijarse metas realistas para cuidar nuestra salud mental y física. Dada la crisis sanitaria no podemos exigirnos a realizar todo lo que hacíamos antes de la pandemia”.
Comunicar para sanar
Muchas veces, se piensa que el hecho de cumplir con el trabajo correctamente es sinónimo de estar bien, pero solo se prioriza lo laboral y se invalida el aspecto emocional. Por lo que, es importante promover la comunicación y el compartir emocional dentro de los grupos de trabajo. Es clave que exista un espacio para hablar sobre sus emociones y preocupaciones de su vida laboral o personal, ya que guardar esas inquietudes se convierte en un agente estresor.
Al respecto, Loreto Villagrán, Coordinadora de la Unidad de Apoyo Psicológico al Personal Universitario, señala: “El compartir emocional, válida la emocionalidad de las personas y se dan cuenta que no son los únicos en esta situación, los demás sirven de referente para validar y normalizar lo que estás pasando. Por eso es importante la comunicación entre los grupos de trabajo bajo la idea del apoyo social, donde uno puede brindar ayuda a los demás y otros pueden ser un gran apoyo para ti”.
Para potenciar estas actividades, la UAPPU UdeC ha organizado diferentes talleres para el personal universitario y realizó capacitaciones respecto del Protocolo de Acción ante emergencias de salud mental a los Directivos que tienen a cargo un equipo humano, donde aprendieron a promover la salud mental y reaccionar y prevenir una emergencia en este ámbito.
Establecer límites
Otro ámbito que se ha dado durante esta contingencia sanitaria es extender los horarios de trabajo, más allá de las jornadas pactadas. Al respecto, lo recomendable es respetar la jornada laboral y evitar ampliarla a altas horas de la noche o los fines de semana, ya que ello permite tener cierto orden y transmite una mayor estabilidad psíquica, lo que ayuda a armonizar la vida laboral y personal.
Héctor Gómez, Psicólogo de la Dirección de Personal y miembro de UAPPU UdeC, comenta: “Es necesario en la cultura organizacional, ir generando procesos comunicacionales que permitan fortalecer y reforzar los límites. Si se empieza a difundir y a socializar ciertas restricciones, el personal UdeC irá estableciendo los límites y la diferenciación entre su vida personal y laboral, sin sentir una culpa o responsabilidad emergente de responder ante todo”.
Lo esencial para los trabajadores y trabajadoras, recalcó el psicólogo organizacional, “es alinear su contexto con estas normativas y sugerencias, con el fin de velar por el cuidado de la salud mental ocupacional y el autocuidado”.